Era casi la segunda semana de Diciembre pasado y no tenía dinero para pagar el salario de mis empleados, mis acreedores me llamaban en las madrugadas para amenazarme por no pagar y estaba a punto de perder mi empresa, mi casa, mis autos y todo mi patrimonio por haberme cruzado en el camino de gente corrupta y prepotente. Pedí préstamos de emergencia para pagar al abogado que me ayudaría a recobrar el dinero que se me debía... Merlina abrió su bolsa de mano y, como buena bruja, sacó una vara mágica de cristal y me la entregó: "Mañana te mando por email un ritual para que lo hagas con la vara... Yo agradecí el regalo más por cortesía, que por un verdadero interés en el talismán que acababa de recibir. Al tercer día se me ocurrió poner la vara mágica sobre la factura que no me pagaban, mientras hablaba por teléfono con la representante de la empresa que me debía el dinero y de inmediato aceptó pagarme. Ahora puedo asegurar que en los primeros cuatro meses del año no he tenido un solo día sin firmar un buen contrato de negocios, gracias a la vara mágica del dinero.
Nathaniel/NYC, New York
